El término “cadena de bloques” (blockchain) se ha mencionado mucho en los principales medios de comunicación, a menudo en relación con las criptomonedas. Si bien es cierto que esta innovadora tecnología se creó como la infraestructura subyacente de estas monedas digitales, tiene otras muchas aplicaciones y algunos expertos incluso afirman que la tecnología de cadena de bloques transformará el mundo tal como lo conocemos. Pero, ¿qué es una cadena de bloques? Aquí le ofrecemos una rápida explicación.
¿Qué es una cadena de bloques?
Básicamente, una cadena de bloques (blockchain) es una cadena de código lineal que todo el mundo puede ver en su red. Está construida con segmentos de código de un tamaño predeterminado (o “bloques”), organizados en una secuencia (o “cadena”), de ahí su nombre. Cada bloque es único y solo puede crearse una vez. Los bloques representan transacciones realizadas dentro de la red, que se muestran en un libro público de registro. En un principio, se creó para impulsar el Bitcoin, pero desde entonces ha evolucionado para prestar servicio a muchos otros aspectos de la tecnología.
Desarrollo de la cadena de bloques
La cadena de bloques (Blockchain) fue creada por un grupo de desarrolladores anónimos bajo el seudónimo de Satoshi Nakamoto. Su objetivo era crear una moneda verdaderamente descentralizada, el Bitcoin, que no tuviera una autoridad reguladora central ni requiriera la confianza de un tercero para el procesamiento de una transacción. En las transferencias de dinero al estilo tradicional, las partes necesitaban pasar por un proveedor de transferencia de dinero de confianza, que verificaba la transacción. Aunque esta práctica está muy aceptada, implica el pago de comisiones y largos plazos de procesamiento. La cadena de bloques se creó para simplificar este proceso.
¿Cómo funciona la cadena de bloques?
Para eliminar al intermediario, la cadena de bloques utiliza un libro público de registro. Este libro no existe en un solo lugar, sino que está duplicado para cada usuario en la red (de manera similar a un Google Doc). Este libro se actualiza en tiempo real con la situación de todos los tokens (Bitcoin, por ejemplo) dentro de la red. Como el libro contiene toda la información relativa a la cantidad de tokens que cada miembro tiene en su monedero de la cadena de bloques, no hay necesidad de verificación por parte de terceros.
Con este proceso, se elimina el intermediario, lo que da lugar a plazos de transacciones mucho más rápidos y básicamente sin comisiones. Sin embargo, el procesamiento de cada transacción requiere una gran cantidad de potencia de cálculo, ya que cada bloque se crea y cifra usando complejas fórmulas matemáticas. Por tanto, cada miembro de la red puede aportar potencia de cálculo y, a cambio, recibe una pequeña comisión. Esta práctica, conocida como “minería” es el modo en que muchos propietarios de criptomonedas han acumulado sus tokens. Dicho esto, es importante subrayar que la minería requiere ordenadores muy potentes y que existe competencia entre los mineros por cada bloque creado.
¿Por qué la cadena de bloques es tan importante?
La creación de la tecnología de cadena de bloques del Bitcoin sentó las bases para otras redes similares, como Ethereum, que se creó para ayudar a los desarrolladores a construir aplicaciones basadas en la cadena de bloques. Aunque la tecnología original se creó para las criptomonedas, su infraestructura puede duplicarse para muchos otros usos. Por ejemplo, gran parte de Internet aún pasa a través de ubicaciones centrales, como servidores, que almacenan enormes cantidades de datos y son vulnerables a ataques. De manera similar a los terceros de confianza ya mencionados, por medio de la tecnología de cadena de bloques pueden eliminarse estos intermediarios.
Esto abre la puerta a numerosas aplicaciones nuevas, como IoT (el Internet de las cosas). Por ejemplo, si Google, Apple u otros gigantes tecnológicos hacen realidad su visión del coche sin conductor, la red de comunicaciones necesaria para coordinar tantos vehículos podría ser una red de cadenas de bloques, lo que eliminaría la necesidad de un servidor central y protegería a los coches autónomos de posibles ataques informáticos.
Conclusión: la cadena de bloques ha llegado para quedarse
En el futuro inmediato, parece que se hablará de la cadena de bloques sobre todo en referencia a las criptomonedas, ya que el Bitcoin sigue siendo la red de cadena de bloques más desarrollada que se menciona en los medios. Sin embargo, los emprendedores de la cadena de bloques no dejan de trabajar para dar a esta nueva forma de red otros muchos usos, y las firmas de capital de riesgo buscan empresas de reciente creación que estén desarrollando estas tecnologías. Aunque las instituciones financieras convencionales siguen debatiendo (y en ocasiones negando) el concepto de las criptomonedas, existe un consenso general de que la aplicación de las tecnologías de cadena de bloques afectará a la tecnología en muchos aspectos. Tendremos que esperar a ver qué está por venir.
Glosario: algunos términos básicos para ayudar a comprender la jerga de la cadena de bloques.
- Bitcoin: la principal criptomoneda del mundo y la aplicación de la tecnología de la cadena de bloques más conocida.
- Cadena de bloques (Blockchain): un tipo de código que incluye un libro de registro compartido que documenta cualquier adición al código.
- Bloque: un segmento de código de un tamaño predeterminado que contiene información sobre una acción específica, como una transacción en la cadena de bloques.
- Criptomoneda: una red descentralizada de tokens, cada una con su código único, que no puede replicarse en la misma red.
- Monedero digital: un lugar de almacenaje único y cifrado para las criptomonedas.
- Ethereum: una red creada como apoyo para las aplicaciones de la cadena de bloques. Ethereum cuenta con su propia criptomoneda llamada Ether.
- Bifurcación: un evento que cambia la naturaleza de una red de cadena de bloques específica, como es un cambio en el tamaño de los bloques o la implementación de protocolos de transacciones más rápidos. Una bifurcación “blanda” describe una situación en la que la forma de la red previa aún es compatible, mientras que una bifurcación “dura” hace que la red anterior sea incompatible, a menudo resultando en la creación de una nueva criptomoneda paralela.
- ICO: oferta inicial de moneda. Una forma de financiación para nuevas redes de cadena de bloques, en la que los fundadores ponen a la venta tokens antes de lanzar públicamente la red.
- Mineros: miembros de una red de cadena de bloques, que ofrecen potencia de cálculo para ayudar a procesar transacciones a cambio de una pequeña comisión.
- Testnet: una red destinada a poner a prueba los nuevos cambios de una red de cadena de bloques antes de implementarlos.
Los precios de las criptomonedas pueden fluctuar ampliamente y, por tanto, invertir en ellas podría no resultar apropiado para todos los inversores. Ningún marco normativo de la UE supervisa la inversión en criptomonedas. Su capital está en riesgo.
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