Desde GameStop a AMC, las acciones de «memes» se han convertido en una sensación de la noche a la mañana en los mercados bursátiles mundiales. Estas acciones, impulsadas por los foros de Internet, han atraído a nuevos inversores minoristas al mercado y han dejado a muchos gestores de fondos de cobertura perplejos, mientras intentan abordar este nuevo fenómeno de inversión. Pero, ¿qué son exactamente las acciones de «memes»?, ¿son una moda pasajera o están aquí para quedarse?
La primera vez que salieron a la luz fue en enero de este año, cuando el minorista de videojuegos estadounidense GameStop (GME), impulsado por el foro de Reddit r/wallstreetbets y otras comunidades de inversores minoristas en línea, se disparó en bolsa un 1900% en menos de un mes. Esta situación dejó en evidencia a varios inversores profesionales de fondos de cobertura que se habían posicionado agresivamente para beneficiarse de una caída de la acción, poniendo de manifiesto el creciente poder de los inversores minoristas y dejando claro que este colectivo ya no podía ser visto como el que siempre salía perjudicado en el mercado. El precio de las acciones de GME cayó entonces un 90%, casi tan rápido como subió, ya que los inversores minoristas movieron sus fondos a otras acciones.
Desde entonces, la comunidad de inversores que sigue estas acciones no ha dejado de crecer:
- El número de búsquedas a nivel mundial del término «acciones de memes» en Google se ha duplicado con respecto al mes de enero. Asimismo, la comunidad de inversores r/wallstreetbets tiene más de 10,5 millones de suscriptores, cinco veces más que a principios de año.
- En la propia plataforma de eToro, la acción de GME ya tiene más seguidores que otras acciones mucho más grandes, como la mayor petrolera, Exxon (XOM), y banco estadounidenses, JP Morgan (JPM), juntos.
- Las acciones de «memes» han vuelto a cobrar importancia recientemente y cada vez son más numerosas. Nuestro índice MEME, formado por 15 acciones, ha subido más del 50% en el último mes, mientras que el índice S&P 500 solo ha subido un 3% en comparación.
¿Qué tienen de particular estas acciones de «memes»?
- Cuentan con un gran número de seguidores en las redes sociales: la palabra «meme» en sí no es ni mucho menos nueva y se remonta al griego antiguo, significaba «imitado», aunque fue Richard Dawkins quien la popularizó en su libro El gen egoísta. En la actualidad, vemos que estas ideas se comunican, se discuten y se analizan en todos los foros en línea para inversores, desde los 10,8 millones de suscriptores de r/wallstreetbets hasta nuestra propia red de inversión social eToro, por mencionar algunas. Esta democratización de las inversiones y el crecimiento de las comunidades correspondientes se han visto aceleradas por la posibilidad de invertir sin pagar comisiones, la posibilidad de comprar facciones de acciones y la posibilidad de usar herramientas de análisis en línea.
- No suelen estar muy valoradas: las «empresas meme» suelen estar atravesando una mala racha o en proceso de cambiar de rumbo. A menudo, esto significa que arrojan pocos o ningún beneficio, por lo que muchos inversores profesionales se posicionan en corto (operan confiando en que el precio de las acciones bajará). GME, por ejemplo, no ha tenido beneficios en los últimos tres años y en enero los inversores estaban posicionados en corto por un importe superior al 100% de las acciones en circulación.
- Son marcas conocidas, pero más pequeñas: las acciones de «memes» suelen representar empresas pequeñas, orientadas al consumidor y bien conocidas por muchos inversores. Suelen estar presentes en centros comerciales, como GME, el operador de cine AMC Entertainment (AMC), el minorista Bed, Bath & Beyond (BBBY); o ser conocidas por haber vendido alguna vez productos tecnológicos de renombre, como Blackberry (BB) y Nokia (NOK). Por ejemplo, GME tenía un valor bursátil de poco más de 1000 millones de dólares antes de su repunte de precio de enero, lo que la convertía en un pececillo frente a las grandes empresas como Apple, con valores bursátiles dos mil veces superiores, de 2 billones de dólares.
Esta combinación de marcas pequeñas, a menudo en apuros, respaldadas por un gran número de inversores que las siguen, conduce a la última característica clave de las acciones «memes»: - Son muy volátiles: las empresas pequeñas normalmente conllevan un mayor riesgo que las grandes, ya que su negocio está menos diversificado y cuentan con menos recursos. Además, la falta de beneficios dificulta el uso de métodos tradicionales de valoración de empresas y los inversores racionales suelen tener opiniones variopintas sobre las probabilidades de éxito de los planes de cambio de rumbo de estas empresas. Por otro lado, una fuerte subida del precio de las acciones obliga a que los que pensaban que iba a bajar el precio de la acción tengan que salir al mercado a comprar dichas acciones, lo que hace que su precio suba aún más. Todos estos ingredientes se combinan para hacer que las acciones de «memes» sean mucho más volátiles que muchos otros valores del mercado, con subidas y bajadas de precio mucho mayores de lo habitual.
¿Qué significa esto?
En las últimas semanas hemos asistido al retorno del fenómeno de las acciones de «memes», ahora con más valores implicados, con más inversores minoristas siguiéndolas en línea y con estos valores registrando rentabilidades de las acciones muy por encima de los índices más conocidos. Sin embargo, el hecho de que estas empresas sean más pequeñas, conlleven un mayor riesgo y tengan una enorme volatilidad en el precio de sus acciones, hace que los inversores deban tener mucho cuidado. Los inversores deben informarse siempre sobre las inversiones y sus riesgos, y ser diligentes a la hora de diversificar entre múltiples acciones y clases de activos.
Las acciones de «memes» están aquí para quedarse
El auge del inversor minorista fue inicialmente descrito como un hecho aislado impulsado por el confinamiento de la pandemia, pero nosotros discrepamos por las siguientes razones:
- Las bases de este movimiento son estructurales y anteriores a los confinamientos; entre estas bases se encuentran el crecimiento de las comunidades de inversión en línea, las herramientas de análisis en línea, la introducción de la inversión sin comisiones y la propiedad fraccionada de acciones.
- El compromiso de los minoristas ha seguido subiendo, en lugar de bajar, incluso cuando el mundo ha empezado a reabrirse. El número de suscriptores en las plataformas de inversión, incluida eToro, está creciendo rápidamente al tiempo que los mercados asisten a un aumento de la entrada de fondos minoristas. Además, se empieza a presenciar un auge de la imitación del comportamiento de estos inversores; prueba de ello es el lanzamiento de fondos de inversión cotizados que imitan las estrategias de los inversores minoristas.
- El fenómeno de las acciones de «memes» se está ampliando y desarrollando, experimentando un nuevo resurgimiento reciente en el que participan más acciones y en el que ya no se le da tanta importancia a las empresas con ratios de posiciones cortas muy elevados (porcentaje de acciones vendidas en corto). Los inversores minoristas también están recibiendo algo de crédito por haber visto valor precozmente en acciones en las que los inversores institucionales no lo hicieron, como en el caso de la empresa de alquiler de coches Hertz (HTZGQ), que ahora sale de la quiebra con su valor patrimonial intacto y tras una guerra de licitación entre los inversores.
Los inversores minoristas han desarrollado una estrategia de inversión en acciones de «memes» única y propia, aprovechando una creciente comunidad en línea y nuevas herramientas de inversión para invertir en valores de consumo más pequeños y menos favorecidos, así como para desafiar cada vez más a los inversores institucionales. Por ello, creemos que las acciones de «memes» han llegado para quedarse.