Entorno de mercado
Semana para la esperanza, para recordar aquella cita bursátil que dice que “el mercado es soberano” y no puedes (ni debes) ir contra él… y semana igualmente interesante para recordar que hay que extremar al máximo la cautela y no dejarse llevar por las emociones. Ahora más que nunca, tener una estrategia bien definida y una cartera adecuada al nivel de riesgo que se quiere asumir es, bajo mi punto de vista fundamental, y sin esas herramientas, uno no debería acercarse a los mercados sin el asesoramiento profesional correspondiente.
Partiendo de la noticia de Pfizer y los resultados alentadores de la efectividad de una vacuna con el Covid-19, las bolsas experimentaron alzas muy significativas resultando, en particular, los valores más castigados en la pandemia, los más beneficiados. La sesión del lunes se caracterizó especialmente por esos movimientos. Carnival subía un 39%, Valero un 31%, Expedia un 25% y así sucesivamente con diversidad de acciones de esos sectores que acumulaban fuertes pérdidas. Lo mismo sucedió en España con valores como IAG, Meliá y Amadeus. Sin embargo y del otro lado, grandes correcciones para Wayfar, Peloton (-20%) o Zoom (-17%). De repente, el mercado vuelve a la “vieja economía” en un descuento optimista de expectativas sobre la vuelta a cierta normalidad.
La importancia del control de la crisis sanitaria como preámbulo imprescindible a la recuperación económica, se ha impuesto finalmente en las bolsas. Una vez demostrado que lo que realmente importaba no era quién ocuparía la presidencia en Estados Unidos, sino cuándo llegaría la vacuna y la forma de superar la pandemia, una especie de FOMO ha invadido, con mayor o menor justificación, los principales mercados y activos mundiales.
El primero de estos cambios viene del lado de la rotación de estilo de inversión. A la vista de los múltiplos muy elevados al que cotizan sectores como el de crecimiento (growth), y el de grupos como el “value” mucho más rezagados, los inversores se han preguntado si tal vez era momento de ajustar las carteras y aprovechar la distorsión existente rotando parcialmente hacía ese último sector. Además, y tomando el Russell 1000 Growth, resulta que las 5 primeras acciones por peso del índice alcanzan una concentración cercana al 38%, provocando un riesgo de no diversificación a considerar.
Esta semana y bajo la idea de cierta vuelta a la normalidad que el control de la pandemia puede traer en 2021, se han visto fuertes movimientos en esa dirección. En concreto y tomando los dos primeros días tras el anuncio de la vacuna, la rentabilidad relativa de un estilo frente al otro se disparó (gráfico vía HReport) en lo que podría ser un inicio de cierto FOMO. Veremos cómo evolucionan ambos grupos en los próximos días y semanas.
Fuente: H. Report
El segundo de los cambios observados, en este caso incitando al FOMO, viene del lado de Wall Street. Es el caso de Goldman Sachs que, en un informe reciente de mercado y al abrigo del esperado control del coronavirus, da buen recorrido alcista para el S&P500. En concreto espera que el índice termine 2020 en los 3700 puntos y para 2021, el objetivo de precios lo establece en los 4300 puntos.
Las asunciones que hace Goldman para fijar esas proyecciones son realmente posibles. Otra cosa es que la realidad nos sorprenda mediante volatilidad, fruto de la existencia de divergencias entre lo esperado y lo realmente acaecido. El banco de inversión cita como fundamento de sus predicciones, la aprobación por parte de la FDA de la vacuna y el suministro a una gran parte de la población en un tiempo relativamente corto, la reducción de la incertidumbre política, la recuperación en “V” de la economía, la mejora continua de los resultados empresariales y una curva plana de tipos en un entorno de constante apoyo por parte de la Fed.
Pese a las altas valoraciones resultantes de la aplicación de distintas ratios, enumeradas por el propio Goldman, se destaca que en el entorno de bajos tipos de interés y su mantenimiento en el tiempo, la renta variable está en términos relativos, aún barata con respecto a la rentabilidad de la renta fija gubernamental y corporativa. Es por eso que, concluye el banco de inversión, el S&P500 tiene el mencionado recorrido.
De momento, el cambio visto en la curva temporal de la volatilidad (VIX) debería alertar sobre tanto optimismo aparecido en mercado y, pese a lo anterior, el inversor debería extremar la cautela a la hora de abrir nuevas posiciones.
Pese a todo lo vivido en la semana y que puede resumirse con este gráfico, ataque a la zona de máximos históricos del S&P500 y aumento de la euforia (sin llegar todavía a datos extremos), no podemos olvidar que aún estamos lejos de la resolución de la crisis sanitaria.
Fuente: H. Report
No en vano y atendiendo a datos actuales, estamos en niveles máximos de contagios en Europa, en Estados Unidos y en un gran número de países. En ese contexto, nuevos confinamientos se están produciendo en distintas partes del mundo que, pese a no ser tan severos como en marzo de este año, plantean importantes impactos económicos.
Preocupa el nivel de hospitalizaciones alcanzado en USA, con datos por encima de los máximos anteriores.
En este contexto y sin olvidar que estamos en un mercado (norteamericano) fuerte, con estímulos que no van a erradicarse y altos niveles de liquidez, no debe olvidarse que la crisis sanitaria aún está lejos de resolución. No hay que perseguir a los precios y solo siendo consciente del momento de mercado en el que estamos, de los niveles de valoración actuales y de las expectativas implícitas en las cotizaciones, podremos afrontar una asignación de recursos de la mejor forma posible.
S&P500
Comentario Técnico. NO recomendación de operación alguna.
La zona de control del rango que veniamos marcando como válido para el S&P500 se ha sometido a presión esta semana. Esos 3500-3550 puntos marcan la referencia a observar esta semana. De confirmarse la ruptura, el índice entraría en subida libre y solo los máximos intradia vistos el lunes pasado marcarían una referencia a observar. Hay que citar la existencia de ciertas divergencias bajistas a nivel de momentum y de RSI. Por abajo, los 3400 primero y los 3200-3250 marcan los soportes a vigilar.
Ibex-35
Comentario Técnico. NO recomendación de operación alguna.
Las sesiones del lunes y martes pasados quedarán en la historia del Ibex-35 por su magnitud, violencia y cambio de sentimiento respecto a la situación previa. Cuando las expectativas de los actores financieros cambian de forma tan radical, todo es posible. Esto significa que, como índice más castigado de la zona euro por los efectos de la pandemia, los rebotes se producen de la misma forma, pero en sentido contrario. La zona clave pasa primero por los 7850 puntos donde, además, cruza la media de 250 sesiones, quedando la verdadera zona a vigilar en los 8000 puntos. De momento hay momentum, no se ha entrado en sobre-compra y la euforia dominante puede seguir manteniendo las opciones de ir a buscar esos 8000 puntos. Por abajo y si no hay fuerza para saltar esas resistencias, los 7500 primero y los 7100 son los soportes a vigilar.
Criptomonedas
La capitalización total se sitúa en los 459.000 millones de USD (no olvide que no equivale a una capitalización de una acción clásica). El BTC representa un 64,6% del total mercado, aumento que sigue siendo constante y mantenido en el tiempo desde verano.
Fuente: coinmarketcap.com
La consolidación que parece estar llevando a cabo el BTC en la zona de los 16.000 USD supone avanzar un 3% semanal. ETH se queda igualmente estable en la zona de los 450 USD y, los más rezagados como son LTC van cerrando diferencias muy lentamente.
Fuente: coin360.com
Bitcoin (BTC)
Comentario Técnico. NO recomendación de operación alguna.
Cuando un activo toma esa pendiente, tanto al alza como a la baja, intentar buscar techos o suelos es, simplemente, imposible. Y si el subyacente tiene una volatilidad anualizada del 80%, mucho más complicado es hacer ese tipo de market timing. Eso significa que, pese al alza experimentada en pocas semanas por el BTC, dicho comportamiento debe ser catalogado como normal, forma parte de las características implícitas del activo y así debe ser estudiado. Otra cosa es que podamos dotarnos de mayor número de herramientas para asignar probabilidades, solo eso, de movimientos futuros. De momento todo apunta a una base argumental solvente para el desarrollo del actual movimiento. Hay volumen, entrada de inversor institucional, el tiempo de HODL en una cartera sigue aumentando, noticias favorables con respecto a la adopción (PayPal incluido), regulación en camino para poner orden en el ecosistema, incremento del reconocimiento del BTC como un asset class más, alza del dominio del BTC y apuesta de reserva de valor, etc.
En ese sentido y llegados a los 16.000 USD nos encontramos en una zona clave. Precios por encima de los máximos semanales de los 16.400 USD suponen abrir el camino hacia la zona de máximos históricos de los 20.000 USD. No hay referencias intermedias y el FOMO puede apoyar este movimiento sin dilación alguna. El momentum es positivo, no hay niveles de sobre-compra en el corto plazo y el sentimiento inversor está en modo euforia.
Y justo esos mismos datos son los que nos invitan, del otro lado, a la prudencia. Ese nivel de euforia inversora solo se había visto una vez desde que analizamos el índice de sentimiento (ver gráfico abajo) y, por sentimiento contrario, esto debiera alertarnos del riesgo de correcciones en zonas de resistencia. Si los precios no logran superar esos 16400 USD, el objetivo inmediato quedaría en los 14.000 USD, siendo un pull-back normal dentro del movimiento desplegado y el 38,2% de corrección del movimiento anterior. Si se pierden, los 12.000 USD serían el último de los soportes a considerar, con un 61,8% de corrección proporcional.
Si tomamos el gráfico de largo plazo en escala logarítmica, podemos apreciar la importancia del momento actual.
Las búsquedas del término “bitcoin” en google trends aún no experimentan un alza destacable, lo que significa que el inversor “retail” se ha quedado fuera de este movimiento alcista y que, en su lugar, el dinero que ha entrado viene del lado más institucional. Esto modifica muchas cosas con respecto al posible comportamiento de los precios futuros y debe ser tenido en cuenta.
Fuente: trends.google
Si miramos la Blockchain para conocer el número de direcciones en positivo (ganando dinero) con un precio de 16.000 USD, vemos que el 96% estarían en positivo a esos precios. Por arriba, entre los 16400 y los máximos históricos sólo quedaría unas 347.000 direcciones en pérdidas con un volumen en BTC de 180.000.
Fuente: Intotheblock.com
Otro de los datos interesantes a vigilar está en el mercado de futuros organizado (CME y Bakkt) como forma de intuir el comportamiento del inversor más institucional. Fíjese que estamos en máximos históricos de flujos así medidos. El número de operaciones con más de 25BTC se ha doblado en 2020.
Y el índice de confianza del inversor, medido como una media entre volatilidad observada, momentum, social media, etc.…) tocando zona de euforia máxima.
Fuente: alternative.me
ORO (GOLD)
La noticia de la vacuna aparecida a inicios de semana provocó la entrada en activos de riesgo y, en consecuencia, la salida de aquellos que funcionan como refugio. Así el oro pasó en una sesión de los 1950 USD que era zona de resistencia, a su soporte más inmediato de los 1850 USD. La pérdida de las medias de corto plazo (50 y 100 sesiones) pone de manifiesto la cierta debilidad existente en el corto plazo. Perder los 1850 supone ir a testear los 1820 primero y los 1790 después. Por arriba, la zona 1920 puede ser un tope para rebotes típicos tras los fuertes ajuestes pero, para pensar en movimiento al alza serios, la clave está en esos 1950-1960 USD.
A nivel de sentimiento, los pools de FXstreet muestran debilidad a corto plazo y cierta recuperación en tiempos mayores.
Fuente: fxstreet
USDMXN (Peso Mexicano)
Contínua la volatilidad elevada en el Peso méxicano en su cruce con el USD. El rebote desde la zona de los 20 USDMXN, soporte de relevancia a considerar, puede tener extensión hasta la zona de los 20,85. De superarla, el camino quedaría abierto hasta el siguiente nivel de resistencia colocado en los 21,50. El consenso de mercado espera que el Banco Central de México coloque los tipos de interés en el 3% antes de verano de 2021.