¿Es el momento de apostar por el crecimiento?
Tras varias semanas intensas centrados en los datos de EE.UU., los inversores se enfrentan a lo que parece ser otra intensa semana en las otras dos principales regiones económicas del mundo, es decir, Europa y Asia. La economía global se enfrenta a dos grandes dificultades que son causa de preocupación y probablemente dominen el mercado global. La primera dificultad es la inflación, o mejor dicho, la falta de ella. Aparte de quizás Brasil y Rusia, la inflación global ha estado cayendo a “niveles de congelación”. La segunda dificultad es el crecimiento. Los inversores y los creadores de políticas se preguntan ¿cuándo se volverá a poner el marcha el crecimiento? Los creadores de políticas evalúan cómo reaccionar, mientras que los inversores reaccionan a lo que hagan los creadores de políticas, tanto en el espacio FX, como en las materias primas, los valores o los bonos. Esta semana estará centrada en los indicadores de crecimiento en Europa y Asia y será la lectura de esos indicadores lo que usen los inversores para preparar su estrategia.
¿La Eurozona está en el camino de la recuperación?
El primer enfoque de crecimiento esta semana estará en la Eurozona. La región ha estado muy agitada con el Euro en caída, tras experimentar un gran golpe debido a que la inflación en la región se evaporó y el crecimiento se ralentizó, hasta prácticamente un parate total. Aún así, como las próximas cifras del PIB como primera publicación del crecimiento de la Eurozona en 2015, las esperanzas colectivas de los inversores de superar las estimaciones están bastante altas. Tras algunas lecturas positivas de los diferentes PMIs en la región del Euro, los que mueven el mercado se dirigen a un pronóstico mejorado. La próxima publicación del PIB de la Eurozona en general, y desde Alemania especialmente, como motor de crecimiento de la región, serán el centro de atención. Si el crecimiento de la Eurozona supera las estimaciones, podrían ocurrir dos cosas: primero, podría permitir al Euro recuperarse y luego subir más alto tras una ligera recuperación en las últimas dos semanas, y segundo, los principales índices de la Eurozona podrían también recuperarse. Las expectativas son que el PIB de la Eurozona crecerá a un ritmo modesto del 0,9% interanual, y el pronóstico del PIB de Alemania es de un crecimiento del 1,4% interanual. Si el crecimiento de la Eurozona crece por encima del 1% y el crecimiento alemán está en, o por encima del 1,5%, los inversores concluirán que el estímulo del BCE está empezando a surtir efecto. Y, si de hecho, el estímulo del BCE está comenzando a surtir efecto, quizá no habrá necesidad de estímulos adicionales (que tienden a debilitar el Euro). Esto podría ser una buena razón para comprar Euros y por tanto es probable que domine el sentimiento por los pares del Euro.
¿Sale el sol de nuevo en Japón?
Tras una caída en picado del PIB a finales del 2014, la economía japonesa ha tardado en recuperarse. Mientras, el estímulo adicional que muchos participantes del mercado esperaron del BoJ en la toma de decisión sobre el interés de abril no se materializó. Esto llevó a los inversores a anticipar un escenario bastante binario; que el ritmo de crecimiento rápido llevó al BoJ a evitar más estímulos o que el BoJ está tomando una posición “espera y observa” para ver si la situación sigue deteriorándose. Si el crecimiento sube por encima del 0,4% anualizado, los inversores se moverán en base al escenario anterior: que el crecimiento ha vuelo y no habrá estímulos adicionales. Esto podría favorecer al Yen pero afectar negativamente al Nikkei ya que un Yen más alto tiende a ser negativo para los exportadores japoneses. Por otra parte, si el crecimiento sigue lento y no cumple con las estimaciones, los inversores esperarán que eventualmente la ralentización fuerce al BoJ a añadir más estímulos o, al menos, a mantener el estímulo a los niveles existentes durante más tiempo. Esto, por supuesto, será negativo para el Yen y siempre que los datos no sean muy “horribles”, podría beneficiar al Nikkei. También es importante tener en cuenta que las próximas publicaciones de la producción industrial china y las ventas al por menor pueden añadir otra dimensión a los desarrollos en Japón, dado que China es el mayor socio comercial de Japón. Si el crecimiento en Japón es débil y los datos desde China también lo son, los inversores pueden volverse aún más cautelosos con el Yen y viceversa.
Vamos al grano
En general, las expectativas se resumen como sigue: en Europa, los inversores tienden a ser optimistas sobre el crecimiento, y si tienen razón, el Euro podría recuperarse, quizá incluso a un ritmo acelerado. En Asia se espera debilidad. Si esto es así, el Yen podría esperar más ventas con una debilidad posiblemente acentuada contra sus competidores europeos.
En la bandeja
Decisión sobre el interés del BoE (lunes) – Tras las elecciones en Reino Unido, la decisión sobre el interés del BoE dominará la Libra. Aunque se espera que la tasa del interés permanezca sin cambios, los inversores anticiparán un sentimiento escrito desde el BoE para obtener pistas sobre las futuras tasas.
Crecimiento PIB alemán (miércoles) – Si el PIB alemán crece en o por encima del 1,5% interanual, será positivo para el Euro.
Desempleo ILO Reino Unido (miércoles) – Si el desempleo cae por debajo del 5,6%, será positivo para la Libra.
PIB Eurozona (viernes) – El principal evento de la semana. Si el PIB de la Eurozona crece por encima del 1% interanual, podría empujar al Euro hacia arriba.
Ventas al por menor EE.UU. (miércoles) – El evento principal para el dólar y Wall Street. Si las ventas al por menor superan las estimaciones, podría favorecer principalmente a Wall Street. Para que el dólar suba, se requiere una combinación de buenas ventas al por menor y que el PIB de la Eurozona no supere las expectativas.
Crecimiento PIB japonés (miércoles) – Si el crecimiento anualizado del PIB japonés no supera el 0,4%, será negativo para el Yen.
Gráfica de la semana – AUD/JPY
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