Situación global
En un momento de máxima tensión por los nuevos temores levantados por la variante Omicron, la caída histórica del petróleo, el desplome de los sectores relacionados con la pandemia o el alza de la volatilidad, en un contexto donde los temores venían del lado de la inflación y el crecimiento, venimos comentando en este repaso semanal de los mercados que, pase lo que pase, lo importante siguen siendo los flujos. Y resulta que a inicios de semana ya se venían produciendo esas salidas de dineros de renta variable global. De momento y con la vista puesta en los soportes clave que abajo comentamos, es indudable que las señales de alerta se han convertido en una realidad que debe ser monitoreada en las próximas sesiones.
El descalabro del precio del petróleo, con alza muy importante de volatilidad, muestra como se ha pasado a descontar una situación de demanda muy negativa, de cómo la incertidumbre se ha adueñado de los mercados y del miedo imperante en las últimas sesiones. Se trata de la novena caída más alta en una sesión de la historia.
Sin embargo, no hay que olvidar que los banqueros centrales NO van a dejar explotar (de momento) la burbuja. Para muestra tenemos que el balance de la FED alcanza un nuevo máximo histórico con 8,6 billones de USD, los tipos a 10 años se colocan en el 1,5% (los reales en el -4,7%) y la temida alza de tipos que se esperaba para junio de 2022, de momento, se desplaza por milagro hasta septiembre….
S&P
La caía del 2,3% del pasado viernes supone la quinta en todo 2021 dentro del rango del 2-3%. Si nos fijamos en lo sucedido en este ejercicio, estamos ante uno de los años más tranquilos con solo 12 días sufriendo caídas entre el 1 y 2%. Ningún descenso mayor al 3%. Por ponerlo en perspectiva, sólo en 2020 tuvimos 16 sesiones con pérdidas mayores al 3%. Así mismo, el máximo “drawdown” de 2021 ha sido del 5,2%. La media durante el año, desde 1928 ha sido del 16,3%.
La volatilidad, que avisamos la semana pasada estaba empezando a experimentar alzas, se disparó un 54% el viernes, la cuarta subida diaria más explosiva desde 1990.
Desde un punto de vista técnico, el movimiento desplegado apunta a la zona clave de los 4550 puntos. La perforación de este nivel nos haría plantear la posibilidad de un ajuste mayor, siendo los 4250 el primero de los objetivos. Por debajo, directos a los 4000 puntos. Si la zona de los 4550 consigue aguantar, recuperar los 4650 es primordial para poder apuntar a cotas mayores.
En este entorno, hemos pasamos de la zona de euforia a la zona de miedo en una sesión. Estos cambios de sentimiento, que no suelen detenerse en únicas sesiones, marcan un cambio de sesgo importante. Sin embargo, desde el punto de vista de la opinión contraria, puede ser entendido como un aumento de probabilidad de estar cerca de un suelo de mercado.
IBEX-35
Por si le faltaban pocos argumentos a nuestro índice para colocarse como uno de los peores a nivel europeo, el regreso de los temores a la nueva variante del Covid ha sido motivo suficiente para generar un verdadero movimiento de pánico en el Ibex-35. Con los valores de la economía social en el epicentro del movimiento, la zona clave de los 8250 es la que tenemos que vigilar. Precios por debajo supondría ir a buscar los 8000 puntos. El abismo espera si se pierde esa zona. Por arriba, hasta que no veamos recuperar los 8800 puntos, nada lleva a tomar posiciones en este indicador.
Criptoactivos
Semana de ajustes también en los activos digitales. Si observamos los flujos, de nuevo lo importante en estos momentos, asistimos a ciertas ventas de ballenas que son las responsables de estas caídas. Tomar beneficios es normal y así parece se ha producido. En principio, puede ser un hecho de corto plazo y hay que seguirlo de cerca.
Desde un punto de vista técnico y para el BTC, la zona clave de los 53.000 USD es la que debemos vigilar. Si se pierde esa zona, directos a los 47-48K USD y ahí se abrirían dudas serias sobre la tendencia. Por arriba, hay que ver precios por encima de los 61.000USD para pensar en un fin del ajuste y observar los flujos y la actuación de esas manos más fuertes.