Comida. Es una de las necesidades humanas más básicas. Sin comida, pereceríamos. Sin embargo, parece que los hábitos que la raza humana ha adquirido en torno a la producción en aumento y el consumo de alimentos han puesto a nuestras especies en peligro. Esa es la razón de que se esté poniendo un mayor énfasis en aprovechar la innovación tecnológica con el fin de solucionar algunos de los problemas más acuciantes relacionados con la comida. Por tanto, no es de extrañar que se espere que este mercado alcance un valor de 700 mil millones de dólares en 2030¹.
Desde los albores de la humanidad, la comida ha sido un motor fundamental de la tecnología. Esto ha sido así desde la creación de herramientas que nos ayudaron a sobrevivir en la era de la caza hasta llegar a la recolección en la era de la agricultura, y posteriormente con la aparición de tecnologías contemporáneas, como la carne preparada en laboratorios, comida impresa en 3D y cultivos modificados genéticamente usando la tecnología CRISPR. Nuestra capacidad de alimentarnos nos ha sido de utilidad durante milenios, pero también ha creado algunos de los peores problemas que la humanidad afronta hoy.
El cambio demográfico
Se prevé que la Tierra, que actualmente alberga algo menos de 8000 millones de personas, alcance una población de más de 10,000 millones en los próximos 30 años, lo que a su vez llevará a un aumento² del 60 % en la demanda de alimentos.
La vida en el mundo de hoy es mucho más cómoda de lo que fue en otros periodos de la historia, lo que ha conducido a un exceso de complacencia y un masivo desperdicio de alimentos. Se estima que se pierde o desperdicia en torno a un tercio de la producción mundial de alimentos, mientras que sigue habiendo más de 800 millones de personas en el mundo que pasan hambre. La tecnología alimentaria seguramente se convertirá en una fuerza motriz tanto para la reducción de desperdicios como para alimentar a quienes pasan necesidades.
El problema medioambiental
Algunos intentos de satisfacer la creciente demanda y la hiperindustrialización del sector alimentario han llevado a la industria a ser virtualmente insostenible desde una óptica ecológica, pues produce en torno a un 30 % de las emisiones de gas de efecto invernadero. Entre los factores que impulsan la industria de la tecnología alimentaria se encuentran las soluciones tecnoagrarias que se están desarrollando para crear formas más sostenibles de producir alimentos, reducir la polución, diseñar cultivos más duraderos y optimizar el consumo de agua.
El comportamiento de los consumidores está cambiando
En occidente, los consumidores están cada vez más al tanto de las implicaciones del consumismo y la importancia de una dieta sostenible. El setenta y cinco por ciento de los millennials dicen estar dispuestos a pagar más por alimentos sostenibles, y recientes avances en el consumo de alimentos les permite poder hacerlo.
Como parte de este cambio, las dietas vegetarianas se están volviendo cada vez más populares. Solo en Reino Unido, se ha producido un aumento del 185 % en la oferta de productos veganos entre 2012 y 2016, y uno de cada cinco británicos menores de 35 años ha probado una dieta vegana³. La popularidad de las alternativas a la carne se demostró claramente con la OPV de Beyond Meat celebrada en mayo de 2019, que vio como el valor de la acción de BYND se cuadriplicó en menos de tres meses.
Además, la popularidad de los smartphones ha dado paso a aplicaciones de envío de comida a domicilio, como UberEats, Deliveroo y Wolt, que permiten a los usuarios pedir comida a una oferta mucho mayor de restaurantes. Los restaurantes ahora pueden ofrecer envío de comida a domicilio sin necesidad de contratar a su propio personal de reparto. Este subsector de la industria podría ganar aún más popularidad en años venideros, pues los automóviles autónomos empiezan a llegar a las calles y en este proceso participará aún más tecnología.
Solución de problemas reales
La tecnología alimentaria está solucionando los problemas existentes utilizando nuevas tecnologías. Por ejemplo, la reciente popularidad de la tecnología de la cadena de bloques ha ayudado a crear varias aplicaciones para las cadenas de suministro alimentarias basándose en esta tecnología. Desde su introducción, varias corporaciones importantes han comenzado a usarla para rastrear y controlar sus cadenas de suministro, lo que ayudará a consumidores y productores a optimizar este proceso.
Pero ahí no acaba la cosa. Numerosas tecnologías que han aparecido en los últimos años contribuirán a la mejora de la industria alimentaria. La inteligencia artificial y el aprendizaje automático ya se están empleando para optimizar la gestión de almacenes al combinarse con la tecnología del Internet de las cosas (IoT). Los avances en materia de sensores, Internet 5G, robótica y muchos otros campos de la tecnología se irán implantando cada vez más para que las operaciones resulten más eficientes.
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Fuentes:
- https://iybusiness.com/wp-content/uploads/2019/07/report.pdf
- https://www.ubs.com/global/en/wealth-management/chief-investment-office/investment-opportunities/sustainable-investing/2019/food-revolution.html
- https://www.theguardian.com/lifeandstyle/2018/apr/01/vegans-are-coming-millennials-health-climate-change-animal-welfare